2.000 años de cura termal en el Balneario de Alange

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Balneario de Alange. Termas Romanas. GrabadoLos habitantes de Emérita Augusta, una de las más importantes villas romanas en Iberia, eran asiduos a las termas de Alange, famosas por las propiedades relajantes de sus Aguas Minero-Medicinales que, gracias a su radiactividad natural y la presencia gases disueltos -CO2 y radón-, están especialmente indicadas para el tratamiento de dolencias relacionadas con el aparato nervioso tales como estrés, insomnio, neuralgias, neurosis, estados depresivos y de agotamiento nervioso.

El pretor Licinio Sereno hizo construir en el S. III termas y estancias auxiliares en el entorno del manantial de Alange, tras constatar la notable mejoría que experimentó su hija Varinia Serena en sus problemas de orden neurológico tras tomar las aguas de Alange. Balneario de Alange. Termas Romanas. PlanoDe la construcción romana original han llegado hasta nuestros días dos termas circulares techadas en cúpula, que han sido declaradas Monumento Nacional y reconocidas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Las civilizaciones visigoda y árabe supieron apreciar el valor del Agua de Alange y disfrutaron de sus propiedades medicinales, pero habrá que esperar hasta finales del siglo diecinueve para que la estación termal experimente su particular renacimiento gracias a la familia Berbén Blanco, que se hizo cargo del Balneario en 1863 y que ha gestionado el Balneario de generación en generación hasta nuestros días, en los que Fernando Fernández-Chiralt dirige el centro que sus antepasados consiguieron revivir.

Balneario de Alange. Termas RomanasTras las idas y venidas del termalismo europeo de mediados del S. XX, la cuarta y quinta generación de la familia Berbén Blanco decide apostar decididamente por el termalismo e inicia un proceso de modernización del Balneario de Alange en los años 70 que se prolonga hasta nuestros días. A partir de la rehabilitación de las termas romanas originales, cuyos restos permanecían ocultos parcialmente, se inicia un plan de ampliación de instalaciones y servicios con el que Alange ha alcanzado la excelencia.

Dentro de este plan, se acomete la restauración de la casa señorial anexa, que se convertiría en el Hotel Varinia Serena con categoría de tres estrellas y contaría con 35 habitaciones. Más adelante, se decide abordar la construcción de una nueva instalación, que llevaría por nombre Hotel Aqualange y contaría con 86 habitaciones, el cual fue inaugurado en el año 2006 y ostenta la categoría de cuatro estrellas.