¿Cuáles son las características comunes de las aguas de estos centros?
Los tres centros que constituyen Caldaria Termal cumplen el requisito imprescindible para denominarse balneario, que es que sus aguas sean aguas minero medicinales y estén registrados como Servicios Sanitarios en el Sistema Sanitario de la Comunidad Autónoma de Galicia. El uso que se hace de estas aguas minero medicinales es siempre sanitario, para ello es necesario, en primer lugar, mantener las condiciones higiénicas y de constancia en su composición, y, en segundo lugar, aplicarlas procurando la salud de los usuarios, es decir, con fines preventivos y/o terapéuticos.
El estudio analítico detallado de cada una de ellas las hace exclusivas. Así, según la temperatura de surgencia, podemos clasificarlas como hipertermales en el caso de Laias y Lobios e hipotermales en Arnoia; atendiendo al residuo seco 110ºC, la mineralización está por debajo del gramo en todas ellas, pero son aguas de mineralización media en Laias, ineralizacion débil en Arnoia y de mineralización muy débil en Lobios. El contenido iónico predominante en las aguas, que es un aspecto importante para su diferenciación, es de componente bicarbonato y sodio en Laias y Lobios y sulfuradas en Arnoia. Estas propiedades hacen que la aplicación tenga los efectos secundarios comunes a las aguas minero medicinales, pero se evitan los específicos de aguas hipermineralizadas o con componentes iónicos controvertidos. En cualquier caso, en usuarios que vayan a hacer uso de técnicas hidrotermales a partir de 4 días se hace obligatorio pasar una consulta médica.
¿Para qué dolencias están indicadas estas aguas? ¿Cada centro termal se especializa en alguna dolencia determinada?
De manera general, por el tipo de aguas minero medicinales y las técnicas de aplicación, nuestro tratamiento está enfocado a procesos crónicos y/o subagudos del aparato locomotor, de tipo degenerativo, inflamatorio y de estructuras para-articulares que cursan con dolor, con limitación del recorrido articular y por lo tanto de la movilidad: lumbalgias, cervicalgias, fibromialgia, síndromes de hombro doloroso, tendinopatías etc. Otro campo de acción es como coadyuvante de procesos dermatológicos de larga evolución como son los eccemas crónicos, psoriasis… Pero fundamentalmente el enfoque terapéutico va dirigido al paciente.
Tenemos en cuenta que, además de los procesos enumerados anteriormente, el paciente toma varios tipos de fármacos, y se acompañan de otros padecimientos que pueden o no estar relacionados con el problema por el que acuden al Balneario, como por ejemplo insuficiencias venosas, piel “frágil” alterada por el sol, por la edad, tensión general mantenida, cefaleas, diabetes, dificultad de la marcha…etc. Por lo que, durante la terapia en los balnearios no debe desatenderse a todos estos síntomas, que se van a ver mejorados después de realizar el tratamiento. Estos tres balnearios son de reciente construcción, el más antiguo fue inaugurado en 1995
¿Con qué medios cuentan para satisfacer las necesidades médicas de sus visitantes?
Quisiera destacar, en primer lugar, el conjunto de personas que compone el equipo sanitario de cada uno de los balnearios; tanto por su perfil profesional, fisioterapeutas, esteticistas termales, masajistas y médicos con una constante ilusión en la formación continuada, como por sus cualidades personales de servicio y empatía con los distintos usuarios que disfrutan de nuestras instalaciones. En cuanto al equipamiento, y las instalaciones que son de reciente edificación destacar las tradicionales técnicas de hidroterapia, baños, duchas, chorros, y un conjunto amplio de piscinas termales, con diferentes temperaturas, elementos de hidro-presión internos y externos, en las cuales se desarrollan distintas actividades de hidrocinesiterapia, aichi, aquagymn, diseñadas para diferentes edades , y salas para realizar una variada carta de masajes, de relajación, estéticos, de drenaje venoso, linfático, técnicas de estética facial y corporal y gimnasios de rehabilitación y recuperación.
