Un año más la Asociación Nacional de Balnearios de España estuvo presente la trigésimo primera edición de la Feria Internacional de Turismo con un stand propio ubicado dentro del pabellón número 10, en la zona reservada para las asociaciones y agrupaciones profesionales de un sector que es pilar básico de la economía nacional.
El stand de ANBAL se convirtió en el eje vertebrador de los representantes de los Balnearios y estaciones termales, ya que algunos de ellos estaban presentes en la feria integrados con los expositores de las regiones a las que pertenecen. Allí se dieron cita varios miembros de la Asociación, que aprovecharon la ocasión para saludarse personalmente e intercambiar impresiones acerca de la actualidad balnearia.
Durante los primeros días de la feria, reservados para la actividad profesional, un gran número de turoperadores nacionales e internacionales y agencias de viajes se interesaron en la oferta balnearia como un valor seguro para potenciar sus paquetes turísticos. Proveedores de productos y servicios y medios de comunicación también se acercaron a recabar información y a presentar sus propuestas.
En los días de apertura al público general se esperaba una afluencia masiva de visitantes, pero las expectativas se vieron superadas por la avalancha de visitantes que eligieron el stand de ANBAL como parada obligatoria en su recorrido por los salones de Ifema. Para informarles correctamente fueron atendidos por personal de la Asociación y varias azafatas, quienes explicaban la oferta disponible a los interesados.
Cabe destacar que los potenciales usuarios de Balnearios que se acercaron al stand de de la Asociación se encontraban dentro de un rango de edad muy amplio, desde veinteañeros hasta octogenarios, si bien cada uno orientaba sus consultas en función de sus intereses. En cualquier caso, todos deseaban llevarse uno de los ejemplares de la revista dispuestos para la ocasión, cuyas existencias se agotaron.
Con los datos en la mano, se pueden extraer varias conclusiones importantes acerca de la evolución de la feria; aunque posiblemente la más destacable sea que, pese a verse reducido ligeramente el número de empresas y expositores presentes, el número de visitantes, tanto profesionales como público general, aumentó notablemente con respecto a la edición 2010.